viernes, 24 de junio de 2011

PENSADORES LATINOAMERICANOS DE LA EMANCIPACIÓN PEDAGÓGICA

La educación es la herramienta usada por los hombres sabios para transmitir a las futuras generaciones los pensamientos que les ayudaran a transformar la vida social de una determinada sociedad. Esta debe estar diseccionada a liberar en el individuo la forma de percibir su mundo. no puede encasillar a la persona en un único modo de pensar y sentir, sino que debe permitir la posibilidad de observar una diversidad de manera de ser que nace de lo profundo del ser humano. 
La educación dese esa perspectiva cumple con una función humanizante y liberadora, porque su centro de atención es el individuo mismo como ser único e irrepetible.  En nuestro caso, Venezuela ha sido influenciada por ideas pedagógicas innovadoras que a lo largo de los años han expuesto hombres ilustres para transformar el mundo y lograr un bienestar colectivo donde cada sujeto encuentra su lugar y puede desarrollarse armónicamente con todo plenitud. 
Entre esos hombres ilustres, tenemos a nuestro libertador Simón Bolívar, quien pregonó que la perfección del ciudadano común se alcanzaría si la educación se dirigiera a construir un modelo de ciudadano con un amplio conocimiento ético y un marcado sentido de participación activa en todos aquellos asuntos concernientes al desarrollo social y económico. Es por ello que en cierta ocasión mencionó que:" Las naciones marchan hacia el término de su grandeza, con el mismo paso en que camina la educación".  Esta idea la reflejó con mucho ahínco en todos sus escritos como: Discursos, cartas, proclamaciones y leyes, porque tenía la convicción de transformara al pueblo venezolano en un pueblo ejemplar y digno de imitar. En otra oportunidad empleó la frase: "El gobierno debe ser maestro". Es a través de esta frase que aclara la responsabilidad que tiene el estado en garantizar una educación de calidad a sus ciudadanos.



Otro personaje ilustre que entendió la importancia de la educación a toda la población fue Simón Rodríguez, que se dio en cuerpo y alma a educar  a sus congéneres debido a que sabía que los cambios genuinos procedían de los aprendizajes a nivel mental, el cual se alcanza a través de la educación. Por eso, escribió en 1840 "Luces y Virtudes Sociales". Una obra en donde se detalla minuciosamente las directrices necesarias para lograr una educación popular.  Esta obra indica que el hombre debe ser preparado para el goce de la ciudadanía mediante cuatro especies de conocimiento o de instrucción categorizado en: Social, corporal, técnica y científica. Con este conocimiento el hombre muestra que está capacitado para enfrentarse a la vida y pasar a ser un animal racional. Además hace hincapié en que la enseñanza debe partir de transmisiones de ideas mucho antes que las letras, es decir, una enseñanza basada en el aspecto verbal  donde las ideas ofrecidas sean las que el pueblo desea, para así, ir perfeccionando la convivencia de todos los ciudadanos y acelerando en progreso económico de cada región, basado en un equilibrio ecológico.




Otra corriente pedagógica que apoya una educación popular fue la llevada a cabo por José Martí, quien se enfocó en que cada país debía crear sus propios modelos educativos, partiendo del contexto social y político en que se encuentren sumergidos los seres humanos.  Expresa claramente que latinoamerica no necesita copiar modelos pedagógicos europeos, sino concentrar todo su esfuerzo en diseñar estructuras educativas que surjan de los pueblos latinos, las mismas deben educarse a las necesidades e intereses de sus ciudadanos con el único objetivo de desarrollar sus potenciales.  Estos modelos o estructuras pedagógicas deben estimular en los individuos un pensamiento flexible, creativo que ayude a los estudiantes pensar por si mismo. El pensamiento pedagógico expuesto por José Martí, se fundamenta en el americanismo y el humanismo.  Este pensamiento luchó contra el escolasticismo de esa época. 


Para el año de 1948 con el proyecto de Ley Orgánica de Educación Nacional, Luis Beltrán Prieto Figueroa puso en tapete los principios de la filosofía educativa con el nombre de humanismo democrático.  Con este humanismo, se comienza en Venezuela a construir comedores escolares, casas cunas, proyectos de alfabetización para obreros y fundación de escuelas normales para los técnicos, lográndose asi, una masificación educativa. El hecho permitió que sectores pocos favorecidos pudieran apropiarse de las herramientas necesarias para desarrollar sus potencialidades lo cual repercutiría en su mejoramiento tanto personal como económico de la nación.
La educación propuesta por Luis Beltrán Prieto Figueroa, tuvo como eje principal el crecimiento personal del individuo.  Además propuso que la educación fuera del carácter publico, porque la educación era del pueblo y para el pueblo, aunque en la selección de los contenidos programáticos dijo que el estado debía ser el agente rector de los conocimientos a impartirse.

Así mismo, Paulo Freire en su escrito Revolución, Ética y Educación Popular. Bases Sociocriticas de una Pedagogía de la Indignación, realizó un cuadro comparativo de la educación dada en sus tiempos como son: antidialogisidad y dialogisidad.
En el primer aspecto se ofrece una educación que se basa en manipular a los ciudadanos.  Se promueve la división de las personas en un grupo que somete a los demás.  La cultura que se impone es la de otros países  obviando las raíces del propio sitio en que vive el sujeto, mientras que en el segundo aspecto se promueve una educación sustentada en la colaboración, la unión, la organización y una síntesis cultural propia del país.  Con esta educación Paulo Freire se propuso transformar la realidad de su nación, desarrollando sus congéneres desde adentro hacia afuera, o sea un desarrollo endógeno, en el cual la educación está dirigida al crecimiento interno del sujeto, pero partiendo del contexto histórico social en que se encuentre inmerso.


Finalmente se puede ver que Moacir Gadotti, expresó en su escrito: Una ecopedagogía por la humanización y desarrollo humano desde la emancipación antineoliberal que el desarrollo humano va unido a una mejor calidad de vida del hombre sobre la tierra.  Este desarrollo se fundamenta en indices de salud, longevidad, madurez psicológica, educación, ambiente limpio, espíritu comunitario y entretenimiento creativo que son indicadores de una sociedad capaz de satisfacer las necesidades de las generaciones de hoy sin comprometer las oportunidades de las generaciones futuras.
El ideal de Moacir Gadotti es crear las bases de una educación sustentable que ayude a los seres humanos a mantener una coexistencia racional con el medio ambiente donde las actividades llevadas a cabo por el hombre no dañe su hogar terrenal y garantice el bienestar a las futuras generaciones.
En conclusión se puede determinar que la educación pasa a ser el punto agido en toda sociedad, porque es a través de ella que el hombre induce a las futuras generaciones a modificar su conducta, la que va a repercutir en los cambios sociales requeridos en cualquier momento histórico.

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